Y aquí estoy… el domingo, aprovechando la ventanita que nos deja “la tormenta perfecta”, subiendo el macuto por la cuesta y con una cierta desconfianza en la cabeza producida por este maldito hombro que lleva ya tiempo dándome la lata,…esto es para reírse, me he lesionado en el curro,… si así es, ni escalando, ni nadando, ni corriendo, ni nada… en el curro, por lo visto la posturita que pongo delante del ordenata no es la adecuada.
A propuesta de Vlady vamos al Risco de Las Bellotas, particularmente me da igual el lugar, aunque prefiero que sea desconocido para mí y que tenga vías accesibles, hoy me viene bien que el sector esté alejado, cuanto más mejor, así el paseo es mayor y la tentación de machacarme es menor.
Pronto dejo de verlo pues la pared es convexa, ya solo lo siento a través de la cuerda, tirón, tirón, otro tirón…y reunión, para abajo pues. Es mi turno, prefiero hacerlo en top-rope pues no me veo con cuerpo, o mejor dicho con hombro, para apretármelo de otra manera, compruebo que la fisura en su primer tercio está mojada y que los empotramientos de pies siguen siendo dolorosos, en top lo más difícil de la vía es hacerte a la idea del dolor que te va a dar según metes el cerrojo de pies y cargas el peso en él. ¡Uuy!… cag’en… y en los empotramientos de manos sin guantes. ¡Ay!…la madre que…, esto de los empotramientos me recuerda un poco a la construcción.
Históricamente, en la construcción, mientras más ignorante éramos, más coeficiente de seguridad poníamos, es decir, los muros más gordos, las vigas más anchas…, por el… por si acaso se me cae todo esto encima… aquí igual, mientras menos experiencia más aprietas y más dolor debes de soportar, también…, por el... por si acaso me caigo con todo esto para abajo.
Según bajo lo primero que pienso y siento es haberle dicho a Carmen que se viniera, el dolorcito de pies y manos que le espera no es de los que crean afición.
Después de Carmen van Sergio, Irma y finalmente Nell.
A todo esto Vlady y Nell, que se habían ido a hacer el primer largo de Alba-Marina, vuelven diciendo que han dejado la cuerda y las cintas puestas, por si queremos ir a hacerla, cuando llegamos Carmen y yo a pie de vía un par de chicas nos han quitado la cuerda y están a punto de meterse en ella. !? Al vernos están un largo rato pidiéndonos disculpas, quizás las mismas que teníamos que haber dado nosotros por haber dejado la vía equipada con la cuerda colgando,… por decir algo.
El destino, al final me toca probar el hombro en una vía yendo de primero, lo noto raro en la bavaresa inicial, pero parece que aguanta; al tocar la campana decido que es la última del día, no quiero tentar la suerte,… ni ver la cara del fisio, si esto cruje, cuando le diga que fue escalando. :)
Mientras aseguro a Carmen llegan Sergio e Irma.
Después de bajar a Carmen me acerco a los macutos a por un trago de agua, Vlady me intercepta, me pide que le asegure, tiene pensado meterse en otra fisurita, Con pelos a los lados.
Foto: Vlady en “Con pelos a los lados”
Vlady tira rápido para arriba, mete parte de la maquinaria en la parte baja de la fisura y pronto le pierdo de vista,… es curioso como llegas a sentir al compañero a través de la cuerda, notas su fuerza, su agilidad e incluso sus dudas y temores. En cierta ocasión, hace ya bastantes años, aseguraba a un antiguo compañero de cordada, el paso era difícil y expuesto, de esos de sufrir, en un momento dado la cuerda se apoyó sobre unos de sus gemelos desnudos, por un momento pude sentir entre mis dedos todas sus sensaciones, fue como si conectara mentalmente con él, lo que sentí fue exactamente lo que posteriormente me contó que había sentido.
La marca de mitad de cuerda pasa con alegría por el ATC. Puf! A ver lo que inventamos para bajar Vlady, según le descuelgo se me ocurre acercarme a por la cuerda de Sergio y empalmarla con la mía, pues el primer seguro está alto, pero la cuerda está relativamente lejos, además, tendría que sacar la mía del ATC, al final optamos por subirme yo, ya con el nudito en mi cabo de cuerda ajustado al ATC, a una repisita intermedia al lado mismo del agujero característico de este risco y desde allí descender los dos más o menos a pelo.
Posteriormente Sergio, ya con su cuerda de 70m, desmontaría la vía.
Foto Vlady: Sergio en “Con pelos a los lados”
Después de un agradable piscolabis a pie de risco, nos vamos por donde vinimos. Extrañamente casa Julián estaba abierta a esas horas de la tarde, así que allí mismo nos apretamos la cervecita de rigor.
Cómo llegar: Desde el Tranco se empieza a subir por las escaleras que hay a la derecha de Casa Julián, una vez terminan estas se gira a la izquierda buscando el PR marcado con señales blancas y amarillas, seguid las señales, una vez llegamos a la Gran Cañada alzamos la vista en dirección al yelmo (que no se ve) y vemos el Risco de las Bellotas, también llamado el falso yelmo por tener desde aquí un cierto parecido con este. Desde aquí (La Gran Cañada) pasar por la fuente de los Altos de Medina y poner rumbo al Collado de la Encina, el risco está a la izquierda de este collado.
A paso normal, haciendo alguna que otra foto, 1 h y 15 min.
También se puede subir desde Catocochinos.
Los croquis: En las guías de Lujan-Zapata “la Biblia” y de Luis Santamaría.
Más información y fotos de ese día: En el blog de Vlady.
Actividad realizada:
396. Kamet, V/6a ?, desequipada.
397. Alba-Marina, L1 6a, M0.