Hace años hice una larga
excursión por la Pedriza con mi amigo Tapi, fuimos por intrincados caminos y semiabandonadas
sendas, de aquello recuerdo una conversación. Tapi, que por aquel entonces llevaba más de cuarenta años andando por aquellos lugares, me comentó algo muy obvio pero que a mí no se me había pasado por la
cabeza, se trataba de la evolución de los caminos. En su dilatada vida de senderista
había observado como nacían, se ensanchaban, cambiaban de trazado o simplemente terminaban
cerrándose por la vegetación debido al escaso tránsito.
Con las sendas
verticales pasa tres cuartos de lo mismo, viendo fotos antiguas se puede ver su
evolución. Algunas vías son cepilladas por los equipadores, quedan reluciente
unos años hasta que la naturaleza y sobre todo su pobre transito las vuelven a
embutir en zarzas y musgo, en cambio otras, en las que el equipador a lo mejor no
se ha esmerado tanto en su limpieza, van evolucionando, no sé si a mejor o a
peor, el caso es que con el tránsito va desapareciendo el musgo; arbustos, raíces
y ramas van cayendo, los cantos se van rompiendo y la roca se va puliendo, y
ahí siguen las vías, algunas incluso con anacrónicas graduaciones debida a la
mencionada evolución.
Javi en la
placa del 9 junto a un testigo de la evolución
P.D. La foto es del pasado
sábado 28 noviembre, ya pasados todos los llamados “veranillos”. Javi no
acostumbra a escalar sin camiseta, pero llevaba una térmica negra y el excesivo
calor le hizo escalar sin ella, en la hablada evolución puede entrar también el cambio
climático, como sigamos así la escalada de adherencia en orientación sur… por
la noche y a la luz de la luna.
Qué hay Antonio!
ResponderEliminarDe esos caminos olvidados tuvimos hace poco Yago y yo sobredosis...una pena que se olviden ciertos "caminos" ya que muchas veces esos olvidados "secretivos" están abocados al olvido por la falta de divulgación y cuando alguien se anima o los encuentra de casualidad, están tan sucios que no se pueden hacer.
Nos vemos en breve en uno de esos "caminos" ;)
Abrazo!
¡Hola Vlady!
ResponderEliminarRealmente lo que me sorprendió de esta placa era lo "limpia" que estaba, la recordaba con más musgo y liquen, con más ramas saliendo por sus fisuras, y quizás con algo más de adherencia.
Aunque esto último no es comparable pues la roca estaba caliente.
Devuelta a casa estuve viendo fotos antiguas, alguna incluso de tu blog, y efectivamente, vi que el transito de gente había evolucionado el sector.
¡Abrazos!