Llevábamos
semanas planeando un viaje a Pirineos, pero debido a la climatología
adversa, copiosas nevadas y vientos de hasta 140 km/h, cambiamos de
planes horas antes de partir. Como estaría el tiempo allá arriba,
que cuando llamé al refugio para cancelar las reservas noté
aliviada a mi interlocutora.
Como
si fuéramos aves migratorias decidimos ir en busca de climas más
benignos, tras barajar la posibilidad de visitar algunas escuelas de
Levante, al final optamos por tomar rumbo sur, nos vamos a Espiel (Córdoba),
donde hay una buena y segura escuela de deportiva con unas no menos
buenas paredes de caliza gris.
Ya
solo tenemos que hacer un ligero cambio en los macutos, los trastos
de invierno por otros más ligeros, y… carretera y manta.
* * *
Lunes 4 de febrero, tras cerca de cuatrocientos cincuenta kilómetros llegamos a Espiel, después de registrarnos en el albergue, que curiosamente es una antigua estación de tren, ponemos rumbo al sector Pared de Estrella, este tendrá unos sesenta metros de altura y deberá acoger unas treinta vías, si no las pasa, pues según cotejamos con los croquis que llevamos, hay nuevas líneas abiertas.
Pablo y Lidya
Tras
corta aproximación llegamos al pie de las vías, lo primero que
hago, antes incluso que ponerme el arnés, es acercarme a tocar la
roca, la sensación que recibo al tacto no es muy buena, parece que
me patinan un poco los dedos, lo achaco a que últimamente solo
escalo en granito, que es más rugoso. A ver lo que tardo en
adaptarme pienso.
Por
razones de experiencia y peso, comparto cuerda con Eloy, la otra
cordada la compones Pablo y Lidia.
Hay
una vía de tres largos que nada más verla me entra por los ojos, se
llama Encuentros en la tercera chapa, pero antes queremos calentar
bien y adaptarnos lo mejor posible a la roca, le damos a tres vías
fáciles que hay sobre un espolón rocoso.
Poco
a poco me voy adaptando a esta roca, aunque mi compañero de hoy,
Eloy, aún no se fía de sus gatos, además, arrastra un catarro que
empeora por momento, a ver como acabamos.
Tras
decirle a Eloy que vaya siempre con el descensor en el arnés, por lo
que pueda pasar, decidimos meternos en una vía nueva que no viene en
ninguno de los croquis que hemos visto, tiene el nombre escrito con
difusas letras verdes en su base,… Nevada…Negada… ¡Negrilla!
Parece que pone, a simple vista parece ser de V o V+, a media vía
hay un aleje que se puede resolver enlazando el segundo de los
bloques que asoma.
La
vía va por el centro de una laja espolón que hay adosado a la pared
principal, enlazo el segundo de los bloques y llego con facilidad a
la reu. Eloy la hace bien a pesar del moqueo con el que sube.
Por
nuestra derecha andan pegándole Pablo y Lidia, vienen más o menos
repitiendo las vías que nosotros vamos dejando.
Para
rematar el día por fin nos metemos en Encuentros en la tercera
chapa, la vía consta de tres largos, el primero de ellos es de V, es
de pura placa caliza con un pasito de “fe pedricera” antes de
llegar a la altura del árbol, cuando llego a la reu no sé si bajar
pues el muro del segundo largo, que es totalmente vertical, intimida
un poco, mientras me lo pienso le digo a Eloy que suba y que no
olvide el ATC por lo que pueda pasar.
Eloy en Encuentros en la tercera chapa
Cuando
llega Eloy a la reu ya lo tengo más que decidido, nos cambiamos los
cabos, para que no se enrede la cuerda, y a por los cachos…
precioso largo, el mejor del día, V+, la entrada de este largo
deberá de estar a 90º aun así se hace bien pues tiene unos agarres
de manos buenísimos, lo único que tiene es que no te puedes caer en
los primeros parabolts, pues lo harías encima del compañero,…¡Que
gozada de largo! Se me ha hecho corto, estoy encantado de haberme
metido.
Mientras
sube Eloy miro el tercer largo, este largo consta de dos tramos, el
primero fácil y el segundo ligeramente desplomado, 6a, para terminar
en una reunión colgado. Llega Eloy nos volvemos a cambiar los cabos
y allá voy.
Esto
no es como el roco pienso a pie del desplome, aquí ha de salir todo
al primer pegue, y… bien, no me resisto a dar un grito de felicidad
al asegurarme a la cadena.
Se
nos acaba el día, mientras sube Eloy el sol se esconde tras las
montañas, se nota como la temperatura cae empicado, montamos los
rápeles y llegamos al suelo con las últimas luces, recogemos a la
luz de las linternas y al albergue, cenita un poco de tertulia y a
dormir.
Tras
un desayuno, que hacemos más fuerte con las tartas que he traído
Lidya de Madrid, volvemos al mismo sector. Después de calentar en
unos quintos, Eloy y yo nos vamos a la derecha del paño, mientras
Pablo y Lidia se meten en encuentros en la tercera chapa.
Las tartas de Lidya
Por aquí ya es primavera
Eloy en Pata Chula
Lidya primer largo de Encuentros en la tercera chapa
Ni
con la guía en la mano encuentro la vía elegida, debe de estar
metida en aquel recodo le digo a Eloy. Delante nuestra aparece unos
nombres pintados en la roca, a ver… A las tres en el Catre estés,
parece que pone, miro la guía y… 6a/6a+, pues esta misma no Eloy.
La vía por el centro del espolón
Pablo en A las tres en el catre estés
Cómo llegar: Por la carretera de Andalucía a la altura del Km 398 tomar el desvío de Espiel, ciudad que aparecerá tras otros 48 km más. El albergue está en la antigua estación de tren. Desde allí mismo pueden verse las paredes calizas. En este enlace del Ayuntamiento de Espiel vienen los sectores de escalada.
El Albergue
Croquis:
Hay varias guías en el mercado de esta zona, por la red encuentras
algunos croquis un tanto obsoletos, como las guías que hemos
consultado, pues hemos visto que hay nuevas aperturas, en este enlace (blog) hay unos pocos.
Nota:
Que nosotros viéramos, todas las vías están equipadas con
parabolts.
Actividad
realizada:
877.
La Bragueta Metálica, IV, M0
878.
Estirpes Indomables, IV, M0
879.
Mil Patas Gordas, V, M0
880.
Negrilla, V, M1 (lazo)
881.
Encuentros en la tercera chapa, L1 V, L2 V+, L2 6a, M0
882.
Frotis Vaginal, V, M0
883.
Pata Chula, V, M0
884.
A las tres en el catre estés, 6a/6a+, M0
885.
La innombrable, IV, M0